PORSPODER

El fin de semana, bueno desde el jueves, lo pasé en Porspoder un pequeño pueblo de la costa atlántica. Lo que me he dado cuenta, es que este mes, Mayo, tiene todas las fiestas posibles y además los franceses tienen la "manía" de hacer puente siempre que pueden. Por eso como la fiesta fue el jueves, se cogen el viernes y hacen un super fin de semana.
Bueno, Porspoder esta a unas dos horas de Rennes, un poco mas tal vez. Es pequeño, pero es precioso, me ha encantado. Lo único malo es el clima, un día llueve otro hace un sol espléndido, por lo que no puedes hacer muchos planes para hacer excursiones. Dimos una vuelta por la costa, con el mar de un azul increíble, luego hicimos un poco de escalada y luego visitamos las playas. Para mi fue super raro ver el mar con todo lo de al rededor verde, porque estoy acostumbrada al mediterraneo y al mar menor sobre todo. Pero esto no tiene desperdicio.
Con los niños lo pasé muy bien, porque la casa donde estábamos tenia un jardín enorme donde, el día que no llovía podíamos jugar y correr super agusto. El único problema era la casa, que parecía que no había paredes, se oía absolutamente todo estuvieras en la parte de la casa que estuvieras, por eso, descansar poco, a las 8 como muy tarde ya estaba en pie. Y el gato, que no se que manía tiene conmigo, yo, que les tengo alergia, todo el día pegado a mi... el domingo cuando nos volvíamos no lo encontrábamos, para mi yo pensaba, pues mira tampoco pasa nada, pero de cara a la familia tenia que poner cara de preocupación. ¡Preocupación por si lo encontrábamos! La solución fue que el padre se fue con los niños a casa y yo me quede con la madre esperando a que saliera el gato de su escondite, al final pusimos una lata de atún como cebo, que funcionó a la perfección. Y el viaje de vuelta, muy tranquilo, la madre conduciendo y hablándome y el gato con el atún poniéndose ciego.
Os dejo unas fotitos para que veáis Porspoder, no, no me pude bañar, es el atlántico y el padre me enseño que había hasta focas.