viernes, 23 de julio de 2010

Pequeños errores irreparables

Nunca he sido de romper muchas cosas, no soy muy patosa ni nada de eso. Pero desde que estoy en casa de los abuelos he roto:

-Un tazón de desayuno.
-Un servilletero de porcelana.
-Una maceta con su plantita y todo.
-Una lamparita.
-El protector del mantel.


Deben de estar deseando de que sea mañana para que nos vayamos. El tazón de desayuno fue porque el niño pequeño casi se mata al caerse de una silla y lo atrapé al vuelo, pero no tuve los reflejos suficientes para atrapar también el tazón. El servilletero, fui a matar una mosca con una servilleta y cogí la que llevaba servilletero, es una guarrería, lo sé, pero no era mi servilleta y la mosca era una pesada. La maceta esta tarde jugando con un balón en el jardín. La lamparita, de eso no tengo ni idea, todavía no estoy segura de que haya sido yo. Y el mantel, pues queridos mios, ha sido el calor de mi portátil quien lo ha derretido, la abuela pensaba que había puesto un plato muy caliente.

5 comentarios:

Misaoshi dijo...

Qué desastre XDDDDDDDDDDDDDDDDDDD

Haces eso en mi casa y al tercer día te invito a irte sin rencor, eh? xD

Candela dijo...

Miralo por el lado bueno: el niño se salvó de un buem mamporro y el bowl del desayuno puede reemplazarse, XDDD. Yo me cargué el papel de la pared de mi habitacion (de 3 de las 4 paredes), rompi la barra del armario del peso de la ropa y no sé qué más destrocé...

Lauri dijo...

jajaja, todavia no nos hemos ido, espero no romper nada mas!

Arald dijo...

Espero que no se te rompa el niño xD

El Zorrocloco dijo...

Arald, +10 XDD

Lo del servilletero y el portátil ya es cebarse, pobres abuelos XDD